Percusión
La música es un elemento muy importante en nuestras vidas y, como no, en las de los niños. Por ello pensamos que debíamos hacer algunos talleres dedicados a trabajarla, en estos en concreto a través de la percusión.
La percusión implica varios factores como la atención, la coordinación, agudizar el oído y, al ser na actividad grupal, la cooperación. El desarrollo de estos factores es la principal razón por la que elegimos llevar a cabo estos talleres.
Taller 1: Música con el cuerpo
En el primer taller trabajamos la percusión corporal. Para ello teníamos una caja misteriosa de la música en la que había algo dentro, los niños debían intentar averiguar qué había en su interior a través de la imaginación y del tacto. Después sacábamos el contenido de la caja, se trataba de unas tarjetas con dibujos de diferentes partes del cuerpo (boca, manos, pies, rodillas, pecho...) en dos tamaños (grande y pequeño).
Cada vez que sacábamos una tarjeta de la caja probábamos como sonaba golpeando esa parte del cuerpo. Cuando teníamos todas las tarjetas nos dábamos cuenta de que las partes del cuerpo se repetían en grande y en pequeño, después de mucho pensar llegábamos a la conclusión de que cuando la tarjeta era grande había que tocar fuerte y cuando era pequeña debíamos tocar flojito.
Una vez habíamos probado como sonaban todas las partes que nos indicaban las tarjetas veíamos un trocito de vídeo del grupo Mayumaná haciendo música con el cuerpo. Finalmente escuchábamos una canción y la tocábamos al ritmo de la música siguiendo las órdenes de las tarjetas que nos enseñaba la profe.
Después de tocar la canción estábamos muy excitados, así que pensamos en una parte de nuestro cuerpo que siempre hace un pequeño ruido siguiendo un ritmo, el corazón. Nos tumbábamos en el suelo con la mano en nuestro corazón y escuchábamos una música relajante tratando de sentir cómo latía nuestro corazón al principio y como poco a poco iba reduciendo la velocidad del latido.
Taller 2: ¡Qué orquesta más divertida!
El segundo taller lo de dedicamos a la percusión con objetos de la vida cotidiana: cazuelas, sartenes, cajas de plástico, cajas de cartón, hueveras, latas, botellas, rollos de papel de cocina...
Cuando empezábamos el taller la profe nos mostraba todos los "instrumentos" y cómo sonaba cada uno para después poder repartirlos.
Como muchos coincidíamos en los instrumentos que más nos gustaban, para repartirlos sin discusiones debíamos ponernos en parejas con niños de otras clases y elegir un código qr, después lo escaneábamos y aparecía el vídeo de uno de los objetos tocando un ritmo, así se nos asignaba nuestro instrumento y debíamos reproducir el ritmo que habíamos escuchado.
Cuando todos teníamos nuestros instrumentos primero escuchábamos la canción que íbamos a tocar muy atentos para después tocarla siguiendo el ritmo.
Al final, si nos quedaba un ratito tocábamos y cantábamos diferentes canciones infantiles.